LOS MAYORES ¨OKUPAS¨ DE ESPAÑA

MÁS DE 6.000 HECTÁREAS DE DOMINIO PÚBLICO ESTÁN USURPADAS POR GRANDES EMPRESAS

Un informe de la Abogacía del Estado da la razón a los grupos conservacionistas que luchamos desde hace años por recuperar la que fue la mayor laguna de España

Terrenos de la antigua Laguna de la Janda «okupados» por grandes propietarios

EL ESTADO RECONOCE QUE HAY TERRENOS DE DOMINIO PÚBLICO OCUPADOS SIN QUE EXISTAN TÍTULOS DE CONCESIÓN

Fruto del trabajo de años de reivindicación, investigación y gestiones administrativas realizadas por la Asociación de Amigos de la Laguna de la Janda con el apoyo de otras entidades conservacionistas como Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO/Birdlife, AEMS-Ríos con Vida, Fundación Savia o la Red Andaluza de Nueva Cultura del Agua la administración del Estado, ante las evidencias aportadas por dichos grupos, inició en 2018 un expediente de Investigación y Recuperación de oficio del Dominio Público en el marco del cual la Dirección General de Patrimonio del Estado requirió a la Dirección General del Agua del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico un informe con el objeto de aclarar la titularidad de los terrenos que formaban la antigua laguna de la Janda.

EL INFORME , evacuado con fecha 28/01/21 por la Abogacía del Estado, concluye que en la Janda hay una superficie de terreno deslindado como dominio público de 6.165 hectáreas. Esos terrenos no habrían  perdido su calificación de bienes de dominio público “pues aunque se transformen, aunque se desnaturalicen (como así ha ocurrido) seguirán manteniendo esa calificación” y que aunque en 1964 se procedió mediante Decreto al rescate de la concesión en su día otorgada, posteriores actuaciones de las Administraciones han dado lugar “a que aquellos terrenos de dominio público se encuentren hoy ocupados por explotaciones agrícolas de particulares”.

DESASTRE ECOLÓGICO E INJUSTICIA SOCIAL

La Laguna de la Janda fue hasta su desecación en la década de los 60 del siglo XX el humedal interior más extenso de España y uno de los de mayor relevancia ecológica de Europa por su ubicación estratégica al borde del Estrecho de Gibraltar, lugar obligado de paso para cientos de miles de aves que anualmente realizan sus migraciones entre Europa y África.

Aunque la desecación y puesta en cultivo de esta zona palustre contribuyó en su momento al desarrollo comarcal y a sacar de la extrema pobreza a parte de la población local también supuso sin duda alguna uno de los mayores desastres ambientales acaecidos en nuestro país y acarreó una notable pérdida de  biodiversidad al desaparecer con el humedal muchas de las especies animales y vegetales que allí habitaban.

A la gran tragedia ecológica de la desecación se sumaría pocos años después una tremenda injusticia social al permitir el Estado Franquista que grandes propietarios “amigos del régimen” siguieran ocupando, de forma indefinida y a cambio de nada, los terrenos deslindados como públicos que si bien originalmente les habían sido entregados mediante una concesión administrativa posteriormente, tras abonarles los costes de las obras de desecación realizadas, serían rescatados por el propio Estado en 1964 con la teórica intención de entregar las tierras al Instituto Nacional de Colonización para otorgarla a pequeños parcelistas. Esa adjudicación de tierras a los colonos sin embargo nunca se llevó a cabo manteniéndose hasta nuestros días,  con la connivencia de los sucesivos gobiernos y las  distintas administraciones públicas, esta usurpación de los bienes públicos por parte de grandes propietarios.  

Sobre dichos terrenos se asientan hoy en día enormes explotaciones agrícolas intensivas de regadío que reportan jugosos beneficios a unas pocas grandes empresas a su vez receptoras de cuantiosas subvenciones de la Política Agraria Común (PAC) de la Unión Europea (la empresa que ocupa la mayoría de los terrenos públicos, Complejo Agrícola S.L., es con mucha  diferencia la que mayores subvenciones recibe de pagos directos de la PAC en toda España, más de dos millones de euros en 2019)[1].  Este gran beneficio empresarial, aprovechando terrenos públicos sin pagar canon alguno y sustentado además en buena parte en subvenciones públicas, no aporta sin embargo apenas rentabilidad social a la comarca ya que al tratarse de grandes explotaciones muy mecanizadas se generan pocos jornales y que además los beneficios e impuestos generados no repercuten localmente al tener estos grupos empresariales sus sedes sociales fuera de la provincia.

LAS POLÍTICAS DE  RECUPERACIÓN Y TRANSICIÓN ECOLÓGICA DE LA UE: UNA OPORTUNIDAD ÚNICA PARA RECUPERAR LA LAGUNA DE LA JANDA

Los nuevos retos y políticas de la Unión Europea y el Estado Español conducentes a la transición hacia sistemas más resilientes y adaptativos que permitan establecer mecanismos de justicia social y ambiental ofrecen la oportunidad de activar la economía bajo el enfoque del Pacto Verde o “Green Deal” que incluye mitigación y adaptación al cambio climático, desarrollo de la economía circular y conservación de la biodiversidad y de los servicios ecosistémicos.

Aprovechando esta coyuntura, y una vez acreditada la titularidad pública de los terrenos, los colectivos que han promovido esta iniciativa consideran que tanto el Estado como la Junta de Andalucía y los Ayuntamientos de la Janda deben implicarse a fondo en este objetivo de recuperación para todos de este espacio emblemático del patrimonio natural español y europeo aprovechando la oportunidad única que para ello suponen los fondos “Next Generation”.

Este humedal lleva ya más de medio siglo sumido en un lamentable abandono y olvido, su restauración aportaría unos servicios ecosistémicos únicos para el continente europeo y contribuiría de forma relevante a la transición ecológica de esta comarca gaditana hacia un modelo de sociedad más justa y ambientalmente sostenible.

Acto público por la recuperación de la Janda

[1] https://elpais.com/economia/2021-02-22/los-senores-del-campo-asi-se-reparten-las-ayudas-europeas-entre-los-que-mas-reciben.html